Impacto de los desastres naturales en la industria mexicana de seguros
México se encuentra en el lugar 23 por su riesgo catastrófico alto ante fenómenos de la naturaleza, así nos lo demostró este 2017; pero la industria de seguros en nuestro país se ha enfrentado a otros eventos que nos han azotado con mayor fuerza.
Los 2 terremotos, 3 huracanes y 2 tormentas tropicales que nos afectaron este año pusieron a prueba tanto a México como a la industria de seguros, la cual respondió con la activación del plan de contingencia que tiene establecido para cualquier siniestro que afecte nuestro país, que además está catalogado por el Banco Mundial en el lugar 23 de riesgo catastrófico alto ante fenómenos de la naturaleza.
Nos encontramos en un lugar altamente expuesto a huracanes porque hay tres zonas generadoras que nos afectan: en el Pacífico, dentro del Golfo de México y algunos que nacen en El Caribe. La temporada inicia a mediados de mayo y, generalmente, termina hasta la segunda quincena de octubre.
Los eventos más destructivos a los que se ha enfrentado la industria de seguros en México, hasta ahora, han sido huracanes. Wilma, el más catastrófico en 2005, por el cual la industria de seguros cubrió 2,125 millones de dólares; seguido de Odile en 2014, aquí el monto cubierto para resarcir los daños fue de 1,141 millones de dólares y Gilberto en 1998 que costó 1,050 millones de dólares en indemnizaciones.
Además estamos ubicados en el “Cinturón Circumpacífico” la región con mayor sismicidad a nivel mundial. Conocida como “el anillo de fuego”, es el espacio donde las placas tectónicas del mundo se mueven constantemente. La fricción continua causada por la placa de cocos que se está metiendo por debajo de la norteamericana es la que genera la mayoría de los sismos en nuestro territorio.
Por los terremotos que azotaron nuestro país en el mes de septiembre se tienen registradas, hasta el momento, 43,130 solicitudes de indemnizaciones y se estimó que el impacto de este evento sería de 19,473 millones de pesos. Tan sólo en la Ciudad de México, 1534 edificios se vieron afectados: 38 derrumbados, 360 con fracturas estructurales y 1,136 con fracturas no estructurales.
Sería importante que todas las personas tengan un seguro que las proteja de estos y otros riesgos a los que nos encontramos expuestos. En México, sólo el 6.5% de las casas están aseguradas por decisión de su propietario y otro 20% a través de un crédito hipotecario.
Un seguro de daños cuida tu patrimonio ante eventos naturales como un huracán, inundación o un sismo, también ante robo y responsabilidad civil; brindándote así, estabilidad financiera al cuidar la inversión que haces al construir o comprar un inmueble.